Si tienes una conexión de 200Mb/s en casa o en el trabajo, puede que gracias a una promoción entre ONO y PlayStation 4, AVM FRITZ!Powerline 1000E PLC puede darte ese margen necesario para aprovechar el ancho de banda por encima de lo que proporcionan las conexiones WiFi más habituales. Porque es una situación cada vez más habitual y conviene adaptarse a los cambios que llegan con las mejoras en la tecnología de comunicación. ¿O acaso tienes aún enchufado un módem analógico?
Las conexiones de fibra o cable ofrecen velocidades de hasta 200 Mbps de bajada y unos 10 Mbps de subida con latencias de menos de 10 milisegundos. Son cifras excelentes aunque si el cable modem o el ONT para la fibra y el router están alejados de los equipos y dispositivos que queremos conectar, lo más probable es que la conexión WiFi no permita alcanzar la máxima velocidad que permite la fibra o el cable. Otro tanto de lo mismo pasa si el router WiFi usa tecnologías inalámbricas de tipo 802.11n sin múltiples antenas (MIMO). El resultado es que de los 100 o 200 Mbps podremos aprovechar entre 30 y 50 Mbps.
Más ancho de banda con AVM FRITZ!Powerline 1000E PLC
Cablear la casa para llevar Ethernet es una solución, desde luego, aunque es costosa. Pero por fortuna podemos aprovechar un cableado existente como es el de la instalación eléctrica para llevar la conexión de banda ancha a otras estancias de la casa. Los dispositivos PLC (Power Line Communications) permiten usar los cables eléctricos para llevar Internet a cualquier parte de la casa que comparta la instalación sin que la distancia sea tan problemática como en el caso del WiFi. La tecnología PLC ha pasado de 85 a 200, 500 , 650 y ahora 1.200 Mbps, aunque esta velocidad es únicamente teórica: en la práctica la velocidad efectiva se reduce notablemente debido a la redundancia necesaria para transmitir datos a alta velocidad sobre un cableado no diseñado para ello. Sin ir más lejos, para una conexión de 100 Mbps, un PLC 500 estaría al límite de lo recomendable para sacar el máximo partido a la fibra.
El kit FRITZ!Powerline 1000E de AVM soporta velocidades de 1.200 Mbps teóricas, lo cual sí deja margen para que no perdamos ni un solo megabit por segundo de nuestra conexión de fibra óptica o cable. La instalación es sencilla: uno de los dos PLC se enchufa en una toma cercana al router, sin usar regletas (importante para evitar interferencias) y conectando la conexión Ethernet a una de las salidas de red del router. En el enchufe donde queramos llevar la conexión insertamos el otro PLC y conectamos la toma Ethernet con la del equipo que necesitemos abrir a Internet usando el otro cable incluido en el kit. Desde un ordenador conectado a Internet descargamos la aplicación FRITZ!Powerline para registrar los dispositivos en nuestra red y evitar mediante encriptación de 128 bits que algún vecino pueda enchufar un PLC en su casa y acceder a nuestra red Powerline. Por supuesto, los puertos Ethernet son de tipo Gigabit Ethernet, aunque en el modo Eco pasan a funcionar a 100 Mbps.
Los LED indicadores de estado permiten monitorizar el estado de los PLC, así como la aplicación FRITZ!Powerline que muestra gráficamente el estado de las conexiones, la versión del firmware y otros parámetros relativos a su funcionamiento. También se puede reiniciar la configuración, o activar el modo Eco para minimizar el consumo. Pero donde mejor partido se saca de estos PLC es en una red donde el router sea también de AVM, concretamente de la gama FRITZ!Box con sistema operativo FRITZ!OS, desde el cual es posible gestionar los dispositivos de la red de casa conectados al router, incluyendo el AVM FRITZ!Powerline 1000E.
Las pruebas de velocidad se han realizado en condiciones óptimas para averiguar si esta solución es capaz de sacar todo el partido a una conexión de banda ancha de cable ONO con 200 Mbps de bajada y 10 Mbps de subida. Dependiendo de la instalación eléctrica, de la presencia de microondas, lavadoras, hornos y otros equipos de alta potencia o de la longitud del cableado la calidad de la transmisión puede degradarse. Pero en buenas condiciones, el resultado de la medida de velocidad ha sido satisfactorio, con un aprovechamiento máximo de los megabits disponibles.
Existen otras soluciones para el problema de la cobertura de red en el hogar, como los extensores de cobertura WiFi, o los routers con tecnologías inalámbricas de última generación como 802.11ac, pero este PLC cumple con su cometido perfectamente. Si necesitamos una conexión WiFi en vez de Ethernet, la solución más versátil es la de conectar un router neutro que tenga como entrada la conexión Ethernet del PLC. Si ya tienes un router que no uses, es una forma de reutilizarlo. O bien puedes instalar un PLC que integre WiFi. Pero esto es otro tema. Centrándonos en esta propuesta de AVM, podemos decir que cumple dignamente con su cometido y elementos de valor añadido como el modo Eco que reduce el consumo al mínimo cuando no hay datos, o la integración en el sistema de gestión de los routers de AVM son una buena noticia.
Contacto: AVM
Precio: 94,90€ (alternate.es)