


La compañía de Xbox ha vuelto a sacudir el panorama laboral con una nueva oleada de recortes. Esta vez, hablamos de más despidos en Microsoft: cerca de 9.000 personas han perdido su empleo, lo que representa un 4% de su plantilla global. La noticia, confirmada por The Seattle Times, no ha tardado en generar reacciones en cadena, tanto dentro como fuera del sector tecnológico. Nosotros, como observadores de esta industria, no podemos ignorar el impacto que estas decisiones tienen sobre miles de trabajadores, ni el mensaje que envían sobre las prioridades actuales de la compañía.
La razón oficial es clara: Microsoft necesita liberar recursos para reforzar su infraestructura de inteligencia artificial y por eso, a nuestro parecer, hay más despidos en Microsoft. Este año, la empresa planea gastar más de 80.000 millones de dólares en este campo, lo que supone un aumento de 25.000 millones respecto al año anterior. Esta cifra no solo impresiona, también revela hasta qué punto la inteligencia artificial se ha convertido en el eje central de su estrategia. Tú, como lector, puedes preguntarte si este cambio de rumbo justifica sacrificar tanto talento humano. Y es una pregunta legítima.
Desde dentro, algunos empleados han expresado su frustración. Un desarrollador de Halo Studios llegó a insinuar que Microsoft está intentando sustituir personal con agentes de IA. Aunque el informe de The Seattle Times matiza esa afirmación, el trasfondo es evidente: la empresa está recortando todo lo que puede para financiar su apuesta por la IA. Y eso incluye áreas que, hasta hace poco, eran consideradas estratégicas, como los videojuegos.
Aquí es donde la situación se vuelve más delicada. Microsoft ha invertido miles de millones en adquisiciones como ZeniMax Media y Activision Blizzard. El objetivo era claro: nutrir su servicio Game Pass con títulos exclusivos y atraer a más suscriptores. Sin embargo, los resultados no han estado a la altura de las expectativas. A diferencia de la música o el cine, los videojuegos no parecen encajar tan bien en el modelo de suscripción. Muchos jugadores prefieren comprar sus títulos favoritos, no alquilarlos.
La cancelación de proyectos prometedores ha agravado la situación. Hace poco más de un año, Microsoft cerró Tango Gameworks, responsables del aclamado Hi-Fi Rush. Ahora, ha hecho lo mismo con un ambicioso looter shooter de ZeniMax Online Studios, conocido internamente como Project Blackbird. Lo más sorprendente es que, según rumores, incluso Phil Spencer, CEO de Microsoft Gaming, disfrutó jugando una versión preliminar del juego. Aun así, el proyecto fue cancelado. ¿Por qué? Porque estaba a punto de entrar en producción, lo que implicaba una inversión considerable. Y en este momento, la prioridad es otra: la inteligencia artificial.
Nosotros entendemos que las empresas deben adaptarse a los cambios tecnológicos. Pero también creemos que hay formas más responsables de hacerlo. Despedir a miles de personas y cancelar proyectos con potencial no solo afecta a quienes pierden su empleo. También daña la reputación de la empresa y siembra dudas sobre su visión a largo plazo. Tú, como consumidor o profesional del sector, tienes derecho a cuestionar estas decisiones. Porque detrás de cada recorte hay historias humanas, y detrás de cada inversión, una elección.
En resumen, ver más despidos en Microsoft no es solo una cifra. Son el reflejo de una transformación profunda, impulsada por la inteligencia artificial, pero con un coste humano y creativo que no podemos ignorar.