


Cuando pensamos en la versatilidad del puerto USB-C, lo primero que se nos viene a la cabeza es la compatibilidad. En móviles, portátiles o consolas, este estándar permite conectar pantallas, periféricos o almacenamiento externo sin complicaciones. Pero si tú esperabas usar uno de esos docks USB-C para Switch 2 con la nueva consola de Nintendo, tenemos malas noticias: no funcionará. Nintendo ha decidido bloquear los accesorios de terceros en la Switch 2, y lo ha hecho de forma deliberada.
Nosotros lo comprobamos al probar varios docks USB-C para Switch 2. Ninguno transmitía señal de vídeo ni permitía usar periféricos. Solo cargaban la batería, como si fueran simples cargadores. ¿La razón? Nintendo ha implementado un sistema de autenticación propietario. El dispositivo conectado debe responder con una cadena específica de datos. Si no lo hace, la consola se niega a enviar cualquier tipo de señal. Es una especie de apretón de manos digital que solo los accesorios autorizados pueden completar.
Este hallazgo no es una suposición. Sean Hollister, periodista de The Verge, utilizó un analizador USB-C Power-Z KM003C para registrar las comunicaciones entre la Switch 2 y varios docks. Su investigación reveló que Nintendo emplea señales USB definidas por el fabricante (vendor-defined) para verificar la autenticidad del accesorio. Si el dock no responde correctamente, se bloquea la conexión.
En este panorama cerrado, hay una excepción: el dock SIWIQU de Antank. Este pequeño dispositivo, que aún no está disponible en Amazon España, sí funciona con la Switch 2. ¿Cómo lo consigue? Emula el protocolo de autenticación de Nintendo. Es decir, engaña a la consola haciéndole creer que es un accesorio oficial. No incluye cargador, pero ofrece funciones adicionales como cambiar entre modo carga y modo dock con solo pulsar un botón. Es más compacto que el modelo oficial y cuesta una tercera parte. Para quienes buscan docks USB-C para Switch 2 que no arruinen el bolsillo, esta es una opción real.
Nintendo no ha explicado oficialmente por qué impide el uso de docks USB para Switch de terceros. Podríamos pensar que se trata de proteger al usuario de productos defectuosos. Pero también es posible que simplemente quiera controlar el ecosistema y maximizar beneficios, como hace Apple con sus accesorios certificados. El dock oficial cuesta 120 €, una cifra difícil de justificar si existen alternativas más baratas y funcionales.
El problema no se limita a los docks. También afecta a funciones como la tasa de refresco variable (VRR). Aunque la pantalla interna de la Switch 2 la soporta, no se puede activar en monitores externos. Y no es culpa del dock. Un usuario de Reddit, Dynamatch, demostró que si conectas un Steam Deck al dock de la Switch 2, sí se transmite señal 4K a 120 Hz con VRR. Esto indica que el hardware del dock lo permite, pero la consola no lo habilita.
La causa podría estar en Nvidia, que fabrica el chip de la Switch 2. Sus dispositivos solo soportan VRR mediante HDMI 2.1, mientras que el dock parece usar FreeSync Premium, una tecnología distinta. Si Nvidia no actualiza el firmware, no habrá VRR externo, por mucho que el dock lo permita.
Mientras tanto, los fabricantes de accesorios seguirán buscando formas de saltarse las restricciones. Es probable que veamos más docks USB-C para Switch 2 que imiten el protocolo de Nintendo. Pero esto nos deja en una situación incómoda: depender de trucos para usar algo tan básico como un dock USB-C. Nosotros creemos que Nintendo debería abrir su consola a terceros. Tú deberías poder elegir el accesorio que más te convenga, sin pagar un sobreprecio ni arriesgarte a que deje de funcionar tras una actualización.
La interoperabilidad es uno de los pilares del estándar USB. Bloquearla va en contra del espíritu de la tecnología. Y aunque entendemos que Nintendo quiera proteger su marca, también debería respetar la libertad del usuario. Porque al final, tú eres quien decide cómo y con qué jugar.